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Segundo Encuentro Presencial VII Cohorte
El pasado sábado 27 de septiembre, en las instalaciones del Colegio San Gregorio Magno, vivimos con alegría el segundo encuentro presencial del Nivel 1 de la VII Escuela de Líderes Católicos de la Arquidiócesis de Bogotá.La jornada inició con un momento de oración, para luego continuar con un enriquecedor taller de escucha activa, donde reflexionamos sobre la importancia de atender con el corazón, evitando distracciones, mostrando empatía y construyendo relaciones basadas en la confianza y el respeto.
Posteriormente, se presentaron los distintos voluntariados de la Arquidiócesis de Bogotá, que son expresión del compromiso social de nuestra Iglesia. El voluntariado es un espacio donde cada persona, desde la fe y la solidaridad, puede convertirse en manos y corazón al servicio de quienes más lo necesitan, contribuyendo al bien común y a la construcción de una sociedad más justa y fraterna.
Los estudiantes de Nivel 2 y Nivel 3 de la VII Escuela de Líderes Católicos de la Arquidiócesis de Bogotá compartieron el sábado 27 de septiembre, una hermosa experiencia en el Hogar del Adulto Mayor Abuelitos Consentidos.
Los estudiantes de Nivel 2 vivieron su segundo ejercicio de inmersión en voluntariado, acompañando a 10 abuelitos en una tarde llena de fe y alegría. Se desarrolló un momento de oración, un espacio de escucha fraterna, actividades de masaje en manos, coloreado, música, baile, canto y, finalmente, la alegría de compartir un refrigerio. Fue un encuentro donde la ternura y el servicio se convirtieron en gestos concretos de amor.
Por su parte, los estudiantes de Nivel 3 profundizaron en la realidad de los adultos mayores en situación de vulnerabilidad, reconociendo las problemáticas que enfrentan y reflexionando sobre cómo, desde las mesas de participación ciudadana y pastoral, es posible generar enlaces y acciones que contribuyan a mitigar estas situaciones de abandono o soledad.
Inspirados en ejercicio, reafirmamos que el liderazgo católico no se trata solo de dirigir, sino de acompañar, servir y transformar realidades con gestos concretos de solidaridad y compasión.
Damos gracias a Dios por esta experiencia y seguimos caminando en la formación de líderes que, al estilo de Jesús, ponen sus talentos al servicio de quienes más lo necesitan.Aquí algunos de nuestros momentos.
